La abstención boliviana en la votación de la resolución de Naciones Unidas sobre Rusia y Ucrania obedece a que por su contenido "no va a ayudar a que se resuelva la conflagración" y por el contrario "puede ser más leña al fuego, lastimosamente", afirmó el canciller Rogelio Mayta y explicó que cualquier posición en esta materia es "meditada".

"La resolución que lastimosamente se ha empujado en Naciones Unidas, lo puedo asegurar y lo podemos evaluar en un futuro cercano, no va a ayudar a que se resuelva la conflagración, o sea, no porque se la haya aprobado mañana no va a haber esa conflagración, no va a ocurrir así, más bien puede ser más leña al fuego, lastimosamente", advirtió.

Bolivia se abstuvo este miércoles de votar en la Asamblea General de las Naciones Unidas por una resolución en la que se exige a la Federación de Rusia que "retire de inmediato, por completo y sin condiciones todas sus fuerzas militares del territorio de Ucrania". Otros 34 países tomaron similar decisión, entre ellos China, Cuba, El Salvador, India, Irán, Irak, Kazajastán, Nicaragua y Pakistán.

Desde la oposición se cuestionó la decisión del gobierno de Luis Arce. El expresidente y jefe de Comunidad Ciudadana (CC) Carlos Mesa y el gobernador de Santa Cruz y jefe de Creemos Luis Fernando Camacho coincidieron en calificaron de "indignante" la posición boliviana en el foro que trató la invasión de Rusia a Ucrania.

Mayta explicó que la resolución de Naciones Unidas tiene varios puntos y "uno solo habla de que debería buscarse resolver todo ese conflicto a través del diálogo, a través de la diplomacia".

"Hay otros muchos puntos resolutivos que no contribuían al acercamiento, que más que ser un puente para buscar una solución construyen una muralla y probablemente sea el objeto de mayor distanciamiento e inclusive puede avivar el fuego de la conflagración", insistió.

Rusia invadió Ucrania y desató una resistencia y un llamado de apoyo a la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y la Unión Europea. La respuesta se materializó en sanciones, sobre todo económicas, al gobierno de Vladimir Putin que no frenó las acciones militares.

Durante la asamblea, que acabó con la resolución de este miércoles, el embajador boliviano Diego Pary condenó la invasión y abogó por la solución diplomática-mediada.

Mayta reflexionó sobre la necesidad de ceder posiciones, porque "nada bueno sale de posiciones que no ceden.

Además, sostuvo que "hacerse a los moralistas resulta difícil" cuando países como Estados Unidos, que es parte de la OTAN y que esta tras las sanciones, invadieron Irak con el argumento de la existencia de armas de destrucción masiva que no encontraron.

"¿Quién le ha dicho algo?, ¿Quién ha juzgado a Estados Unidos? ¿La Corte Penal Internacional le esta juzgando?" cuestionó en alusión a la investigación iniciada en el tribunal internacional contra Rusia.