El defensor del Pueblo, Pedro Callisaya, anunció este viernes que se logró llegar a un cuerdo entre las Alcaldías de Colcapirhua, Quillacollo y dirigentes sociales de Cotapachi.
"Ratificamos que el diálogo es el camino. Hoy se consolidó un acuerdo amistoso entre los Gobiernos Autónomos Municipales de Colcapirhua, Quillacollo y dirigentes sociales de la Comunidad de Cotapachi, para viabilizar las demandas vigentes", informó el Defensor del Pueblo a través de su cuenta en la red social 'X'.
Callisaya agregó que el acuerdo "restablece la pacificación en el sector" en el que a inicios de semana dos personas perdieron la vida tras enfrentamientos con la Policía, que fue al lugar en busca de desbloquear el botadero de Cotapachi.
El conflicto en Cotapachi se prolongó por casi dos semanas, puesto que los pobladores bloquearon el relleno sanitario en demanda de su delimitación.
Respecto al incidente ocurrido el pasado lunes, el ministro de Gobierno, Marco Antonio Oviedo, confirmó que un subteniente de 28 años admitió haber hecho uso de su arma de fuego y por eso fue aprehendido y será imputado por el delito de homicidio, tras la muerte de dos personas.
"Sí, ya está probado. El mismo joven oficial ha admitido, que es también un hecho de buena fe, no ha tratado de eludir su responsabilidad, no ha tratado de ocultar, él admitió", afirmó Oviedo.
La autoridad, en ese sentido, lamentó que un oficial joven haya truncado su carrera por usar su arma de fuego sin autorización y en medio de una situación violenta originada, dijo, por grupos delincuenciales.
"Manifiesto mi plena solidaridad con este agente joven que va a este tipo de eventos donde hay delincuentes que les están esperando (…) No encubrimos a nadie, pero tampoco vamos a dejar solos a los que cumplen con su deber bajo ataque", sostuvo.
En ese sentido, el Ministro de Gobierno aseveró que en Cotapachi existen grupos delincuenciales que tienen el objetivo de avasallar tierras de esa región para luego comercializarlas.
La autoridad explicó que en el lugar se hallaron evidencias como drones, dinero, vehículos y dinamita, además de registros fílmicos que muestran intentos de quemar a efectivos policiales.
"Es doloroso la pérdida de dos personas, pero también es doloroso que un suboficial, un hombre joven, vea truncada su vida al reaccionar ante la agresión", señaló.
Según su versión, los policías fueron víctimas de emboscadas con el objetivo de evitar el cumplimiento de una sentencia constitucional, que garantizaba el ingreso de vehículos con residuos sólidos al botadero.