Un diálogo político entre el exvicepresidente Álvaro García Linera y el portavoz presidencial, Jorge Richter derivó en la proyección de candidatos del MAS de cara a las elecciones generales del 2025. El que fuera acompañante de Evo Morales reveló que el actual presidente de la Cámara de Senadores, Andrónico Rodríguez, de la línea evista, puede ser la alternativa entre Evo Morales y el presidente, Luis Arce.
"Como candidato, Evo Morales o Andrónico Rodríguez", dijo el exvicepresidente cuando le consultaron a quién ve como candidato del MAS en 2025. En cambio el portavoz contestó con un: "no es tiempo" (para saber quién será el candidato)".
Las dos facciones del MAS ya proclamaron a sus candidatos, los radicales del MAS creen que Evo Morales es el único que puede postular y desahuciaron abiertamente a Luis Arce; mientras que los partidarios de este postularon nuevamente al binomio Lucho-David para las elecciones generales venideras.
García Linera alertó, sin embargo, que, si el MAS se presenta con dos candidatos el precio político será la derrota del masismo en los comicios, pese a que los opositores siguen atomizados y no encuentran un liderazgo que conduzca esa corriente. Ambas personalidades desarrollaron un debate político en el programa "El central", que se emite por la red Abyayala.
El portavoz fue más allá y dijo que en el MAS no solo existen las dos corrientes conocidas sino son hasta tres, sin hacer referencia a cuál sería la tercera opción. Las palabras de Richter se vincularon al bloque que respalda al actual vicepresidente, David Choquehuanca, quien reivindica la recomposición ancestral de Estado.
La segunda autoridad nacional impulsa una agitada agenda de reuniones con distintos sectores populares y fue acusado abiertamente por la dirigencia del MAS de ser el principal impulsor de la división interna. Choquehuanca proclama la renovación de las corrientes y dijo que el proceso de cambio que impulsan no es propiedad de nadie, en clara alusión a Evo Morales.
Richter planteó la necesidad de cerrar heridas con sectores opositores y dijo que en este momento la gente ya está hastiada de las pugnas de radicalismos y, por tanto, la propuesta electoral debería comprender el replanteamiento de la visión política del MAS.
Para García Linera, la oposición en global tiene un 40% de voto duro y el 50% sería del MAS, lo que dejaría solo un 10% de indecisos que pueden inclinar la balanza en una elección. Aseguró que las pugnas internas que existe en este momento deben parar o ese 40% puede crecer y apartar del poder al MAS.