El Gobierno nacional consideró este sábado innecesario la decisión de los maestros urbanos de radicalizar sus medidas de presión desde el próximo lunes en demanda de su pliego de 200 puntos y reafirmó su apertura al diálogo. "Es inerario (las medidas de presión) cuando hablamos de educación tenemos que hablar de educación, pero de manera participativa, no podemos desarrollar una educación a capricho del magisterio urbano", afirmó este sábado el ministro de Educación, Edgar Pary, en conferencia de prensa. En un consejo consultivo de la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia (CTEUB), los maestros decidieron el viernes continuar con las medidas de presión desde el lunes con el bloqueo de caminos y rechazar la propuesta del Gobierno sobre sus cinco demandas. Esta semana protagonizaron a diario marchas violentas en el centro de La Paz, que acabaron con la detención de tres maestros, quienes posteriormente fueron puestos en libertad. Si bien a un inicio la CTEUB presentó su pliego de 200 puntos, en el que no incluyó la actualización de la malla curricular, y al que el Gobierno respondió, los maestros pidieron que se prioricen cinco temas: presupuesto, asignación de ítems, carga horaria, la aplicación de la malla curricular y el congreso educativo. Pary refirmó la imposibilidad de incrementar del 10,8% al 30% del Producto Interno Bruto (PIB) el presupuesto para educación, como piden los maestros, y recordó que en los últimos dos años el Gobierno creó 7.500 ítems. Además, reafirmó que la aplicación de la actualización de la malla curricular no se la puede revertir porque varios maestros ya están ejecutándola al igual que las estudiantes que están adquiriendo conocimientos sobre robótica, idiomas, ajedrez y la lucha contra la violencia hacia la mujer. Lamentó que la CTEUB no haya acudido a las tres convocatorias para dar sus aportes a esta labor de actualización y que ahora pretenda "desechar" todo el trabajo del que participaron maestros de base, padres de familia y estudiantes. Sobre el congreso educativo, Pary denunció que el magisterio urbano pretende marginar a los docentes de las zonas rurales y también a los padres de familias. Consideró inaceptable que solo el magisterio urbano y el Ministerio de Educación definan un tema que involucra a toda la sociedad. Luego de mencionar que la Central Obrera Boliviana (COB) se embarcó en este proceso, el ministro anunció la elaboración del calendario de actividades rumbo al congreso educativo. En la conferencia de prensa, la autoridad también dio cuenta que en el "sector rural las actividades educativas con completamente normales" y advirtió que las medidas de presión que ejecutarán los maestros urbanos solo apuntan a convulsionar el país y afectar la democracia, como sucedido el año 2019 cuando se produjo la ruptura del orden constitucional. "Esa (es) la figura que se está pintando", denunció el ministro. No obstante a ello, ratificó la predisposición del Gobierno a retomar el diálogo con la dirigencia de la CTEUB, en tanto los requerimientos cuenten con estudios técnicos de respaldo y no motivados por "el capricho de algunos dirigentes". En su opinión, a la dirigencia de los maestros "le interesa más su bolsillo y otros intereses políticos, pero no la educación" y que por ello insisten en parar las labores educativas y cumplir sus medidas de presión. Ante ello, aseguró que se aplicará la normativa como corresponde. "De acuerdo a la información que reporten nuestras direcciones distritales de educación, a quienes falten se aplicará la sanción", anticipó.